martes, 6 de febrero de 2018

EL CASO CHOCOBAR Y EL DERECHO A LA VIDA




Que el neoliberalismo es un proyecto de deshumanización social ya no caben dudas.
La civilización que la humanidad supo construir a través de sus legislaciones más avanzadas en función de garantizar sobre cualquier otro valor el de la vida humana, es puesto en duda por el neoliberalismo para el cual el valor de la propiedad, de los bienes y del orden social desigual se sitúa por encima de la vida humana. 
Se puede matar, en el manual de este moderno neoliberalismo, si es para proteger un bien, un derecho de propiedad o el orden social injusto y desigual que intentan cristalizar Es decir, hay cosas que están, para los valores de esta ideología, por encima de la vida humana. Nada parecen recordar de las devastadoras guerras del siglo XX con sus millones de muertos, después de las cuales la humanidad decidió, al menos en su mayor parte, darse un nuevo cuerpo normativo que pusiera el derecho a la vida por encima de cualquier otro.
El caso del policia Chocobar, quién fuera de servicio mató por la espalda a un ladrón cuando este escapaba luego de apuñalar a una persona para robarle, deja en evidencia a través de la actuación posterior del Presidente Macri quien lo recibió y casi lo condecora, el desprecio profundo por la vida que tienen los funcionarios del actual gobierno. Sobre todo por la vida de los pobres, grupo social del que forman parte tanto el policía Chocobar como el joven ladrón asesinado por éste.
La persistencia del llamado "estado policial" que obliga a los efectivos policiales, según los estatutos de las fuerzas, a actuar aún cuando están fuera de su horario de trabajo y los habilita a la portación de
armas, es uno de los problemas fundamentales que llevan a la pérdida de vidas tanto de policías como de ciudadanos que puedan estar cometiendo delitos. Además de constituir un caso flagrante de precarización y superxplotación laboral, ya que el policía estaría así "de servicio" las 24 hs. del día, trabajando sin paga y con un riesgo más alto que el que su ya riesgoso trabajo implica, y con el agravante que al actuar en "estado policial" suele estar en soledad, sin apoyo ni instrumentos de comunicación para pedir refuerzos, lo que lo motiva a actuar de forma más violenta tanto por temor como por impericia. La mayoría de las muertes de policías y presuntos delincuentes se dan bajo en la situación de "estado policial". Esta vetusta y peligrosa reglamentación interna de las fuerzas de seguridad aún pervive en los estatutos policiales. Pero fue eliminada, enhorabuena, en la nueva Policía de la Ciudad. Este hecho demostraría que los nuevos estatutos policiales, más modernos, dejan de lado el estado policial porque pone en riesgo tanto la vida de los efectivos como de los presuntos delincuentes y de la ciudadanía en general.

La irresponsabilidad del acto de "premiación" del policía Chocobar que el Presidente Macri llevó adelante, habilita el accionar violento de las fuerzas represivas estén o no de servicio,constituyéndose en un riesgo para la vida humana en general, propiciando tiroteos en la vía pública y con riesgo de una escalada de violencia generalizada. Y pone en situación precaria la vida de los ciudadanos sean o no delincuentes y de los mismos policías.
Pero como empezamos diciendo, el respeto por la vida humana que tienen los funcionarios del gobierno es nulo, sobre todo si es vida de pobres, sean estos policías, ladrones o simples ciudadanos.